Los trabajadores de la fábrica procesadora de caolín fundada por Ernesto Che Guevara hace 41años, en la Isla de la Juventud, diversifican los surtidos de esa planta, con el propósito de sustituir importaciones. Gracias a la reconversión tecnológica que hizo a una vieja máquina el jubilado Rafael Maitín, fundador de la entidad, se aprovecha el ciento por ciento del carbonato contenido en el caolín, que pulverizado se utiliza como material constructivo en el acabado de las edificaciones. Esta innovación ofrece un producto de alta calidad, que permite, con un considerable ahorro de combustible, buscar nuevos mercados nacionales y foráneos, ya que el carbonato es un importante componente de alimento para animales. Desde este mes se pondrá en marcha una nueva línea de trabajo para producir cemento cola, a partir de arena sílice, materia prima abundante en el municipio especial, cemento blanco y aditivo, con el propósito de dar cobertura a la necesidad local y del país. Ampliada y modernizada en 1979 y 1985, esta fábrica beneficia el caolín gris, blanco y Partagás, importante recurso para la producción de cerámica, electrodos, acumuladores, plaguicidas,aisladores, papel, calzado y ladrillos refractarios. Hoy se da respuesta de manera eficiente a la demanda nacional sin explotar al máximo la capacidad instalada, pues fabricantes como los de pintura y neumáticos no siempre utilizan el mineral pinero, todavía con suficiente reserva natural en los yacimientos locales. A unos 13 kilómetros de Nueva Gerona se localiza esta industria fabril, única de su tipo en Cuba, la cual tiene el 70 por ciento de su fuerza laboral calificada. El caolín tiene múltiples usos en industrias productoras de aluminio, ladrillos, cemento, cosméticos, farmacéuticos, alimentos para animales, fertilizantes, pesticidas, catalizadores, tintas y colorantes, entre otros.
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